viernes, 2 de junio de 2017

LOS NUEVE OFICIOS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Historia

La primera en practicar esta devoción es Sta. Margarita María de Alacoque. Cuenta la Santa que estando un día en un patio cerca al tabernáculo, se le presento, el Sagrado Corazón, más brillante que el sol envuelto de amor puro, rodeado de serafines y la invitaron a asociarse con ellos, con el fin de tributarle un homenaje continuo de amor, alabanza y adoración al Santísimo Sacramento. En muchas ocasiones se asoció Santa Margarita Ma a los espíritus angélicos para glorificar al Corazón del Salvador. Y dice que desea éste que nosotros le imitemos, en fin de que hallándonos unidos y asociados a ellos, suplan por nosotros en su divida presencia, tanto para tributarle nuestro homenaje, como para amarle por nosotros y por todos los que no le aman, y para reparar las irreverencias que nosotros cometemos en su santa presencia En la vida de Santa Ma Alacoque, toda dedicada al Sagrado Corazón de Jesús por la Comunidad del Primer Monasterio de la Visitación de Sta. María, en Madrid, se insertaron los cinco primeros oficios; “El de Mediadora, Reparadora, Adoradora, Victima y Celadora. Nuestro señor mismo le dió un oficio haciéndola medianera para pedir al Padre Eterno que se dé a conocer este Sagrado Corazón, al Espíritu Santo que lo haga amar y a la Santísima Virgen para que haga sentir los efectos de su poder a todos los que se dirijan a Él. Y sobre todo la vida de Nuestro Señor en el Santísimo Sacramento nos señala los diferentes Oficios que Él mismo desempeña, siendo modelo y ejemplar nuestro Los Nueve Oficios, tales como hoy día se usan, fueron tomados de los escritos de la Beata por un Sacerdote Jesuita, fervoroso adorador del Corazón de Jesús, y redactados por vez primera en español en 1830 para las Religiosas de la Visitación en España, siendo traducido del español al Francés, y del francés al italiano y otros idiomas.




1° OFICIO: EL PROMOTOR

Unido al coro de los Tronos, de las doce a las tres de la tarde


        Fin Especial: Promover la devoción al Sagrado Corazón de Jesús y esforzarse por llegar a ser, unido al Corazón Inmaculado de María, como el “mediador” entre Dios y los hombres, en orden al establecimiento del Reino Universal del Corazón de Cristo Rey    

        Promesa particular: (Hecha a Santa Margarita María), como podemos creer piadosamente, para los que cumplan este oficio: "Jesús mismo será su Mediador (de una manera más especial) ante su Padre Eterno”.

        Ofrecimiento de la práctica del oficio para todo el mes (primer viernes de mes):
       
¡Oh Señor Jesucristo! Por medio del Corazón inmaculado de María y unido al coro de los Tronos, ofrezco a vuestro Divino Corazón todas mis oraciones, actividades y sufrimientos de este mes por todas las intenciones por las que os inmoláis continuamente en los Altares. Más particularmente las ofrezco suplicando al Padre Celestial que ilumine a los pobres hombres para que conozcan por fin las aspiraciones, los ideales, los afectos, las delicadezas y todas las excelentes y eminentes virtudes de vuestro Corazón, y así sean inducidos todos a tomarlas como regla de conducta entre sí, en su vida privada, y en todas sus relaciones sociales, políticas y religiosas. De este modo vendrá a nosotros vuestro reino y se establecerá plenamente sobre la tierra.
Las ofrezco para que el Espíritu Santo inflame a los hombres en el amor hacia vuestro Divino Corazón y en el deseo de ver al mundo abrasado del fuego que habéis venido a traer. Las ofrezco. En fin. Para que la Santísima Virgen interponga su poderosa mediación, para que todo el mundo, sobre todo los que confían en vuestra bondad. Experimenten los poderosos y saludables efectos del Reino de vuestro Corazón de Majestad infinita. Así sea. ”

        Virtud particular: Será procurar con gran solicitud atraer algún alma a la devoción del Sagrado Corazón de Jesús, e infamar más y más a los que la profesan, para lo cual se harán varias oraciones y Sacrificio, y se hablará a menudo de las excelencias y ventajas de este devoción

       Práctica de la virtud: Al menos cinco veces por dia, acordándose, por ejemplo, de las Cinco Llagas de Jesús Crucificado, hacer algunos actos como los que siguen:
·         Esforzarse por reproducir en nosotros las aspiraciones y virtudes de nuestro Rey.
·         Aprovechar las ocasiones para promover la devoción al Sagrado Corazón.
·         Repetir la oración o la jaculatoria correspondiente al Oficio, o simplemente decir: "Corazón Sagrado de Jesús, deseo ardientemente que todos los hombres os conozcan y os adoren cada vez más".
·         Ofrecer en espíritu las misas que se celebran en el mundo, para que la Verdad, la Justicia y la Misericordia del Corazón de Jesús, reinen en la tierra.

      Visitas al Santísimo / Oraciones:
      “Jesús, Rey de Corazón Divino, uniéndome al Corazón inmaculado de María y al Coro de los Tronos para suplir mi insuficiencia, os adoro en espíritu durante todo el dia, pero más particularmente durante estas tres horas, en las Sagradas Hostias donde permanecéis realmente por mi amor; y me refugio con ardiente afecto en lo más íntimo de Vuestro Sagrado Corazón. Que todos los hombres, conociendo sus tesoros inagotables y repudiando los placeres y satisfacciones mundanas, vengan a gustar las delicias inefables que reserváis en este Corazón para los que os aman".

       ¡Oh dulcísimo Jesús, haz que conociendo todos los hombres los inestimables tesoros de tu divino Corazón y abandonando los placeres del mundo, vengan a ‘gustar las inefables delicias que en tu Corazón tienes preparadas a los que te aman!

        Rezar tres Padrenuestros, y tres Salves, pidiendo a Dios por intercesión de los Sagrados Corazones de Jesús y de María que encienda en los de todos los hombres, y en particular de los congregantes el fuego santo de su divino amor.

         Después de un profundo acto de fe y de adoración a Jesús en el Santísimo Sacramento, procurando unirse a los  sentimientos de Mediador que palpitan en su Corazón, se dirá:
“¡Oh Corazón Sagrado de Jesús! Uniéndome al Corazón inmaculado de la Santísima Virgen, y a los espíritus celestiales del Coro de los Tronos, os pido con vivas instancias que. Por los méritos infinito de vuestro Corazón, os dignéis reinar como Maestro Supremo en ‘nuestra Congregación, y en el Corazón de cada uno de sus hijos; en todas las otras Congregaciones Religiosas, en la Santa Iglesia Jerárquica, en toda la sociedad humana, sobretodo en tantos millones de almas que os han costado vuestra sangre, pero que no os adoran porque no os conocen. Os pido además que nos concedáis la gracia de cumplir fielmente la adoración en espíritu y la virtud del Oficio" (recordarla por un simple pensamiento).

      Jaculatorias:
·         “Corazón Sagrado de Jesús, venga a nosotros tu reino”
·          “Cuándo, Señor, os conocerán y amarán los hombres cual vos merecéis
·         “Corazón de mi amable Salvador, haz que siempre arda y siempre crezca en mi tu amor
·          “Corazón Sagrado de Jesús, deseo ardientemente que todos los hombres
    os conozcan y adoren cada vez más”
·          “Santificado sea, Señor, tu santo nombre”

2“OFICIO: EL REPARADOR
Unido al coro de las Potestades, de las tres a las seis de la tarde


       Fin especial: Pedir perdón de las injurias que se hacen a Jesús en el Santísimo Sacramento y procurar con oraciones y comuniones fervorosas reparar tantos agravios. ¡Ay Señor, si sólo os ofendiesen los infieles, los herejes o impíos! Más ¡ay! Son también los cristianos... ¡he sido yo mismo!

        Promesa particular: “El que se emplea en reparar los pecados de los otros, es tan agradable a Nuestro Señor según su promesa, puede humildemente tener con confianza de que El a su vez obtendrá misericordia".

         Ofrecimiento de la práctica del oficio para todo el mes (primer viernes de mes):
"Adorable Jesús, por medio del Corazón Inmaculada de María. Y unido al Coro de las Potestades, os ¿todas las oraciones, obras y sufrimientos de este mes, por todas las intenciones por las que os inmoláis sobre los Altares. 
Os las ofrezco más particularmente para daros una satisfacción, ofrezcas una reparación y obtener de misericordia el perdón de los ultrajes y ofensas de los hombres; sobre todo de las que han cometido contra el Santísimo Sacramento de la Eucaristía. Así sea"

                Virtud particular: Su virtud será la fidelidad en el exacto cumplimiento de "todas las obligaciones de su estado venciendo todos los obstáculos y respetos humanos que se lo impidan: hará cada dia cinco actos de esta virtud, ha por ejemplo, los trabajos de su oficio del mejor modo que sepa, y los ofrecerá a Dios en unión de los méritos del Sagrado Corazón.

                Práctica de la virtud: Al menos cinco veces por dia, hacer algunos de los actos propuestos a continuación, en honor de las Cinco Llagas de Nuestro Señor:

·          Observar la más afectuosa y profunda reverencia hacia el Santísimo Sacramento
·          Hacer algún acto de observancia regular o renovar la intención de hacerlo. ,
·         Vencer todo respeto humano en el cumplimiento de cualquier deber.
·          Pedir perdón por las flaquezas y tomarla resolución de re-pararlas enseguida
·         Ofrecer en espíritu de reparación las Santas Misas que continuamente se celebran en toda la tierra.

                     Visitas al Santísimo / Oraciones:

“Jesús, Rey de Corazón Divino, uniéndome al Corazón Inmaculado de María y al Coro de las Potestades para suplir mi insuficiencia, os adoro en el Santísimo Sacramento del Altar durante todo el día, pero más particular durante estas tres horas, encerrándome en vuestro Corazón Sagrado como en una prisión de Amor y ofreciendo vuestros méritos infinitos a la Majestad Divina ofendida y ultrajada en este Sacramento adorable”

        ¡Oh Jesús mío!, tu corazón es un tesoro, y nuestra confianza es la llave con que se puede abrir. Haz que conozcamos su inestimable precio

         ¡Que tenga yo un solo corazón y esté tan frío, Señor, para corresponder a vuestro Amor, y resarcir la tibieza de tantos hombres ingratos para con Vos!

Después de un acto de viva fe y profunda adoración a Jesús presente en las Sagradas Hostias del Sagrario se dirá de todo corazón:

          "¡Oh Corazón Divino de Jesús! Unido al Corazón inmaculado de la Santísima Virgen y a los espíritus celestiales del Coro de las Potestades, quiero pediros perdón y desagraviaros de las misas mal celebradas, de las comuniones con tibieza, sobre todo por las almas que  están especialmente consagradas, y de las faltas cometidas en la Comunidad que más han podido desagradar a vuestro Divino Corazón. Os pido también que me concedáis la gracia de cumplir fielmente la adoración en espíritu y la virtud del Oficio" (recordarla por un simple pensamiento).
          Acto de reparación (para leerlo durante la visita): "Os adoro, Jesús, Rey amantísimo, por todos los que no os adoran, os amo por todos los que no os aman; deseo reparar toda la ingratitud que vuestro Corazón recibe de los hombres y para mostraros mi amor, os doy mi corazón y me consagro enteramente a Vos, ahora y por toda la eternidad. Así sea"
          
          Jaculatorias
·         ¡Oh Dios mío! ¡Os ofrezco los méritos infinitos de vuestro Sagrado Corazón en reparación en reparación sobre las injurias que recibís en el Santísimo Sacramento!
·         “Corazón de mi amable Salvador, haz que arda y siempre crezca en mi tu amor
·         “María, Madre mía, guárdame de todo pecado y de toda mala compañía”


3º OFICIO: EL ADORADOR
Unido al coro de las Dominaciones, de las seis a las nueve de la noche


         Fin especial: Uniendo sus humildes alabanzas a las que el Sagrado Corazón rinde continuamente a la Santísima Trinidad, el Adorador se esforzará en suplir con frecuentes adoraciones el deplorable y general olvido de Dios que el mundo.

          Promesa particular: “El Padre busca tales adoradores... que adoren a Dios en espíritu y en verdad"

         Ofrecimiento de la práctica del oficio para todo el mes (primer viernes de mes):
        “Divino Corazón de Jesús, por el Corazón Inmaculada de María y asociado al Coro de las Dominación ofrezco las oraciones, obras y sufrimientos de este mes, por todas las in—tenciones por las que Vos os inmoláis altares. Os las ofrezco en particular para reparar el olvido de Dios que hay en el mundo, uniendo mis alabanzas a las que Vos ofrecéis continuamente a la Santísima Trinidad. Y os consagro y dedico para vuestra mayor gloria todo e que se haga en toda la tierra… Así sea”

          Virtud particular: Guardar la más profunda reverencia en las iglesias y capillas guardando verdadero recogimiento y respetuoso silencio, sobre todo porque Jesucristo habita en ellas.
Práctica de la virtud: Al menos cinco veces por dia, en honor de las cinco Llagas de Nuestro Señor:
·         Pedir que se observe el más profundo respeto en las iglesias y capillas en donde habita Jesucristo en el Santísimo Sacramento.
·         Durante este mes, tener siempre la más recogida actitud, en la capilla o en las iglesias.
·         Yendo a visitar al Santísimo Sacramento, hacer el equivalente de la segunda adición de la segunda semana de los Ejercicios Espirituales de San Ignacio: "Pensar a dónde voy y delante de quién, acordándose de Aquél que nuestras adoraciones”
·         Cuando se sale, al ver un campanario o una iglesia, saludar a Dios que allí se ha hecho prisionero, dulce compañero de nuestro destierro.

       Visitas al Santísimo / Oraciones:         
      
“Divino Corazón de Jesús, por medio del Corazón inmaculado de María y en unión del Coro deDominaciones, para suplir mi insuficiencia, 'es adoro durante todo el dia, pero más profundamente durante estas tres horas en el Santísimo Sacramento del Altar, deleitándome interiormente con el cántico que los Bienaventurados entonan cielo a la Santísima Trinidad: Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios de los ejércitos"
       ¡Oh Jesús mío, digno adorador de la Majestad divina! yo me uno con todo mi espíritu a las continuas adoraciones, que rindes a vuestro Padre celestial en el secreto de vuestro Divino Corazón, y quisiera que exhalase mi alma todos los afectos que vos comunicáis a María Santísima, y a vuestros santos, para honraros y glorificaros dignamente por toda la eternidad!
“Ya que no puedo, Trinidad Augusta, adoraros cual Vos merecéis, os ofrezco las adoraciones que os rinde justos y la Reina de los Santos, con las que os rindió Jesucristo en el secreto de su Corazón”
Después de un acto de viva fe y profunda adoración a Jesús presente en las Sagradas Hostias del Sagrario se de todo corazón: “Divino Corazón de Jesús, os adoro con toda mi alma por el Corazón inmaculado de María. Por su intercesión, y en unión del Coro de las Dominaciones, os suplico que concedáis a cada miembro de esta Comunidad nombre de la cual yo hago esta visita, a todos los miembros de esta Congregación, a los religiosos de otras órdenes y a todos los sacerdotes seculares, el espíritu de fervor y de celo para cumplir las obligaciones de su estado “Yo os ofrezco también, oh Corazón Sagrado, vuestros méritos infinitos en reparación del deplorable y general olvido de Dios en el mundo suplicándoos en cambio que nos concedáis la gracia de observar fielmente la adoración en espíritu y de cumplir la virtud del Oficio" (recordarla por un simple pensamiento).
“Oh Corazón Divino, verdadero adorador y perfectísimo amante de la Divinidad, tened misericordia de mi" (tres vece honor de la Santísima Trinidad).
   
    Jaculatorias:
·         “Corazón de mi amable Salvador, haz que arda, y siempre crezca en tu amor”
·         “María, madre mía, Guárdame de todo pecado y de toda mala compañía”
·         “Jesús, Dios mío, yo os adoro aquí presente en el Sacramento de vuestro amor”


4º OFICIO: EL AMANTE
Unido al coro de los Serafines, de las nueve de la noche a las seis de la mañana




         Fin especial: resarcirá la indiferencia y frialdad de los corazones consagrados a Dios
       
          Promesa particular: “Si desterráis todo sentimiento de amor propio y todo respeto humano,          gustaréis la suavidad de su dulce intimidad” (Santa Margarita María).


         Ofrecimiento de la práctica del oficio para todo el mes (primer viernes de mes):
"Adorable Jesús, por medio del Corazón Inmaculada de María y asociado al Coro de los Serafines, os ofrezco todas mis oraciones, obras y sufrimientos de este mes por todas las intenciones por las que Vos os inmoláis en los altares.
Os las ofrezco en particular para reparar la indiferencia de los corazones que os están consagrados".


          Virtud particular: La fidelidad de la esposa que roba el corazón del esposo con sus puros y ardientes afectos.     Exactitud en las cosas pequeñas. Pero todo por amor y en todas las cosas.

          Práctica de la virtud:
·         Hacer lugar al divino amor en nuestro corazón luchando contra el amor propio, desterrando toda afición puramente natural, todo respeto humano, toda ambición terrestre, todo deseo de consolación humana.
·         Hacer a menudo algunos actos de amor y de petición de amor.
·         En todas nuestras acciones y sufrimientos tener el cuidado de mostrar nuestro amor a Jesús, de ser “del pequeño número de sus amigos" (Santa Teresa del Niño Jesús).
·         Recordar que la Oración y la Comunión son las dos hogueras donde se inflama el amor divino. Multiplicar durante el dia las comuniones espirituales.
·         Todos los miércoles hará a Jesús Sacramentado una visita, y le pedirá se digne conceder a todos los asociados un corazón según Dios, que sepa amarle cuanto es debido.


        Visitas al Santísimo / Oraciones:        
        
“Oh Corazón Divino de Jesús, os adoro en las Sagradas Hostias consagradas del Sagrario, por el Corazón Inmaculado de María y en unión del coro de los Serafines, para suplir mi insuficiencia, y encierro mi corazón dentro de vuestro Sagrario, en vuestra dulce compañía”.
         ¡Oh Corazón amantísimo de Jesús, fragua divina donde arde aquel amoroso fuego que viniste a traer a la tierra y en que con tanto ahínco deseas ver encendidos nuestros pechos! Ardan. Señor, hasta consumirse en esa llama suavísima.     Seráficos espíritus de la corte celestial, os suplico rendidamente digáis al autor de mi vida que yo quisiera amarlo hasta desfallecer en su dulcísimo amor.
         Antes de dormirse: “Yo dormiré, pero mi corazón permanecerá en vela dentro del de mi Amado" "Oh Corazón adorable de Jesús, yo suplico al Corazón lnmaculado de María y a los espíritus celestiales del Coro de los Serafines que os amen y os adoren en mi lugar y en mi nombre todo el tiempo que dure mi descanso".
         Durante las oraciones de la mañana: “Os adoro, Corazón Divino de mi adorable Redentor, por el Corazón Inmaculado de María y, dando fervientes acciones de gracias a los espíritus celestiales que se han dignado suplir mi ausencia delante de Vos con sus ardientes oraciones, os renuevo, oh Corazón Dulcísimo, mis protestas de amor. Y por el mismo Corazón Purísimo de vuestra Madre y la intercesión del Coro de los Serafines os suplico que os dignéis inflamar en el fuego de vuestro divino amor los corazones tibios y lánguidos para que ahora y eternamente vivamos abrasados en      vuestras celestiales llamas. También os suplico que nos concedáis la gracia de guardar fielmente la adoración en espíritu y de poner en práctica la virtud del Oficio" (recordarlo por un simple pensamiento).

Después de un acto de viva fe y profunda adoración a Jesús presente en las Sagradas Hostias del Sagrario se dirá de todo corazón:

        Jaculatorias:
·          “Oh Corazón amabilísimo, que nuestro corazón se abrase en el fuego de Vuestro en el tiempo y en la eternidad”
·         “Os amo, dulce Jesús mío: ¡quien os hubiese amado siempre”
·         “Corazón de mi amable Salvador, haz que arda, y siempre crezca en tu amor”
                                           
5º OFICIO: EL DISCÍPULO

Unido al coro de los Querubines, de las seis a las nueve de la mañana.


      Fin especial: pedirá al Señor se digne derramar los abundantes raudales de su divina sabiduría en los entendimientos de todos los hombres, y tomará como particularmente dirigidas a si estas palabras del divino Maestro: « Aprended de mí que soy manso y humilde de Corazón.»
     Promesa particular: “Cuanto más silencioso seas, más serás enseñado y más se grabará en tu corazón la importante lección de tu adorable Maestro: su dulzura y su humildad".


     Ofrecimiento de la práctica del oficio para todo el mes (primer viernes de mes):     
“Adorable Jesús, por medio del Corazón Inmaculada de María y unido al Coro de los Querubines, yo os ofrezco todas mis oraciones, obras y sufrimientos de este mes, por todas las intenciones por las que os inmoláis sobre los Altares los ofrezco en particular para obtener la gracia de ser dócil a vuestras enseñanzas y vuestras inspiraciones sobre todo en la oración y en la Comunión, y para que los que están encargados de enseñar sean fieles a vuestra doctrina y no se aparten jamás de ella. Amén”.
Virtud particular: Su virtud será corresponder fielmente a las divinas inspiraciones, especialmente por el recogimiento y silencio, no hablando sin necesidad. "

       Práctica de la virtud:
·         Examinará cada dia los buenos pensamientos que haya tenido, y el modo como ha correspondido a ellos; y si allá haber cometido alguna falta pedirá a Dios perdón, y pondrá en ejecución sus buenos pensamientos, aconsejándose antes con su director espiritual.
·         Leer durante algunos minutos al dia alguna buena lectura
·         Acordarse de rogar por los profesores y los escritores, y más particularmente por los profesores de Universidades, facultades y seminarios católicos. No olvidarse de los protestantes, modernistas, ateos, etcétera.…
·         Guardar de una manera más particular durante este mes todas las Reglas del silencio y del recogimiento.
·         Ponerse en la escuela del Sagrado Corazón. Cuando se ha de tomar una resolución decirle: ¿Qué quieres que haga?
·         En la oración y las ocupaciones verle por la fe, diciéndonos: "Aprended de Mí que soy manso y humilde de corazón”
·         Procurar acordarse interiormente de las lecciones recibidas y ponerlas en práctica en orden a nuestra perfección

Visitas al Santísimo / Oraciones:
¡Oh Corazón lleno de infinita sabiduría, que dichosos son Señor, los que aprenden en vuestra escuela! Enseñarme, amabilísimo Corazón, pues os habéis dignado admitirme por vuestro discípulo: haced a mi Corazón dócil a vuestras divinas lecciones, y traed a vos con eficacia a todos los que resisten a la verdad.
¡Oh Corazón lleno de infinita sabiduría, cuánto aprenden y que pronto, los que logran tenerte por Enséñame, amabilísimo Corazón, pues te has dignado admitirme por discípulo tuyo. Haz mi corazón dócil a tus divinas lecciones. Y atrae a Ti con eficacia a todos los que resisten a la verdad.
       “Jesús Rey de Corazón divino, uniéndome al Corazón Inmaculada de María y al Coro de los Querubines para suplir mi insuficiencia, os adoro durante todo el dia; pero más particularmente durante estas tres horas. En el Santísimo Sacramento del Altar, entrando en vuestro Corazón Divino como en una divina escuela donde se aprende la ciencia del casto amor que hace olvidar las vanidades del mundo, deseando poner en práctica vuestras lecciones para mi perfección”.
       Después de un acto de viva fe y profunda adoración a Jesús presente eh las Sagradas Hostias del Sagrario se dirá de todo corazón:       
“Oh Divino Corazón de Jesús en el cual están todos los tesoros de la Sabiduría y de la Ciencia. Oh, cuanto aprenden y cuán presto, los que llegan a teneros a Vos por Maestro. Enseñadme, oh Corazón amabilísimo y condescendiente, puesto que Vos habéis decidido recibirme como discípulo vuestro. Haced mi corazón dócil a vuestras divinas enseñanzas. Guiad a los que están encargados de instruir y atraed a Vos a los que resisten a la verdad”.

Veni Creator Spiritus.      
 
 Ven, Espíritu Creador, visita las almas de tus fieles y llena de la divina gracia los corazones, que tu    mimo creaste       .
       Tú eres nuestro Consolador, don de Dios Altísimo, fuente viva, fuego, caridad y espiritual unción.
       Tú derramas sobre nosotros los siete dones; tu', el dedo de la mano de Dios; tú, el prometido del Padre; tú, que pones en nuestros labios los tesoros de tu palabra.         
      Enciende con tu luz nuestros sentidos; infunde tu amor en nuestros corazones; y, con tu perpetuo auxilio, fortalece nuestra débil carne          .
      Aleja de nosotros al enemigo, danos pronto la paz. Se tú mismo nuestro guía. Y puestos bajo tu dirección evitaremos todo lo nocivo.          
      Por ti conozcamos al Padre, y también al Hijo; y que en ti, Espíritu de entrambos. Creamos en todo tiempo       .
      Gloria a Dios Padre, y al Hijo que resucitó, y al Espíritu Consolador. Por los siglos infinitos. Amén.

      V. Envía tu Espíritu y serán creados         .
      R. Y renovarás la faz de la tierra.
      Oración: Oh Dios, que has instruido los corazones de los fieles con la luz del Espíritu Santo, concédenos según el mismo Espíritu, conocer las cosas rectas y gozar siempre de sus divinos consuelos. Por Jesucristo nuestro Señor Amén.

          Himno al Espíritu Santo.       
          
Ven Espíritu Santo y envía desde el cielo, un rayo de Tu luz.
          
Ven, Padre de los pobres, ven, Dador de los dones, ven, luz de los corazones,
          
Consolador Óptimo, dulce Huésped del Alma, suave alivio.
          
Descanso en el trabajo, brisa en el ardiente estío, consuelo en el llanto.
         
¡Oh luz Santísima, llena lo más íntimo de los corazones de Tus fieles!
          
Sin tu ayuda, nada hay en el hombre, nada que sea inocente.
          
Lava lo que está manchado, riega lo que es árido, sana lo que está enfermo.
          Doblega lo que es rígido, Calienta lo que está frío, Endereza lo que está desviado.
          
Concede a Tus fieles Que en Ti confían, -Tus sagrados dones.
          
Dales el premio de la virtud, dales el puerto de la salvación, dales la felicidad eterna. Amén.

          Jaculatorias:
·         “Enséñame, Señor, a hacer tu voluntad”
·          "Jesús, manso y humilde de Corazón, haced mi corazón semejante al vuestro"
·         “Aprenda yo, Señor, a ser como Vos, manso y humilde de corazón”

6º OFICIO: LA VÍCTIMA
Unida al coro de las Virtudes, desde las nueve hasta las doce de la mañana


        Fin especial: Ofrecerse como Víctima a Jesús en unión con su Corazón Sagrado para que sus
divinos designios de aplacar la Justicia Divina se cumplan. Espíritu de sacrificio, para aplacar el enojo divino contra los pecadores        

     Promesa particular: A los que cumplen el Oficio de Víctima por él: Que no teman, El será su fuerza.

     Ofrecimiento de la práctica del oficio para todo el mes (primer viernes de mes):
“Oh Señor Jesucristo, por media del Inmaculada Corazón de María, y asociado al Coro de las Virtudes, ofrezco a Vuestro Divino Corazón todas mis oraciones, actividades y sufrimientos de este mes, unida a las intenciones por las os inmoláis en las Altares. Os las ofrezco en particular uniéndome a vuestra estado de Víctima en la Santa Mis Santísimo Sacramento, deseoso de participar en vuestra inmolación, con vuestra ayuda, en reparación de las pecados del mundo y para aplacar la cólera divina indignada contra los pecadores y obtener misericordia”

        Virtud particular: Abnegación sumisa y resignada. Espíritu de mortificación, guarda de los sentidos

        Práctica de la virtud: í
·         Unirse espiritualmente a Jesucristo en espíritu de víctima, ofreciéndose a cada instante del dia y de la noche como víctima expiatoria y propiciatoria
·         Aceptar ser tratado como Nuestro Señor lo fue, sobre todo en el Calvario y en el Santísimo Sacramento
·         Dar gracias humildemente a Dios por nuestras penas y sufrimientos, acordándonos de las palabras en la Agonía, o aquellas del Salmo: “Fiat(hágase), Fiat...Amén”
·          Hacer actos de mortificación exteriores y sobre todo interiores.
·          Reprimir alguna de las pasiones desordenadas, o su mal genio, o abstenerse de comer alguna cosa todos los viernes, y mortificando algunas veces en el día su curiosidad de mirar o hablar.

       Visitas al Santísimo / Oraciones:         
    
¡Oh Corazón humildísima, víctima perpetua de amor sacrificada en nuestros altares! ¿Pedís Señor otra víctima que os acompañe en vuestro sacrificio? Heme aquí, Dios mío, rendido a vuestra voluntad para ser hostia inmolada y consumida en las llamas de vuestra divina amor para mayor gloria de vuestro Eterno Padre y por la conversión de los pecadores!
   "Jesús, Rey de Corazón Divina, uniéndome al Corazón Inmaculada de María, y a los espíritus celestiales del Coro de las Virtudes, para suplir mi insuficiencia, as adoro durante todo el día, pero más particularmente durante es horas, y me ofrezco a vuestra Corazón Divino para participar en vuestro estado de Victima en la Santa Misa y en el Santísimo Sacramento del Altar. '
        “Oh Padre Eterno, puesto que os habéis dignado elegirme por Víctima, recibid con benevolencia mi sacrificio en unión con el de vuestra Hija adorable. Así sea”.
        “Corazón Divino de Jesús, uniéndome al Corazón Inmaculada de María y al Coro de las Virtudes, adoro, prosternado en espíritu, la Justicia divina, llena de santa indignación contra la desgraciada humanidad estúpidamente levantada contra vuestra Majestad, su santa Ley y su Iglesia. Deseo unirme a los sentimientos de ardiente caridad y de profunda sumisión de vuestro Corazón hacia vuestra Padre Eterno, y le suplica con las más afectuosos instancias aplacarse por vuestras méritos infinitas y use de misericordia con el mundo entero".

          Acto de reparación: “Postrada a vuestros pies, y ansioso de probaras mi amor, Oh corazón de Jesús traspasado de dolor a causa de nuestros pecados, as consagra mi cuerpo y mi alma. Todos mis pensamientos. Deseos, intenciones palabras y acciones; as ofrezco todos los latidos de mi corazón, durante mi vida y en la hora de mi muerte. Que manos de vuestra Padre en espíritu de inmolación, con todas sus angustias, penas y dolores. Deseo por ello haceros un acta de desagravio, para reparar todas nuestras tibiezas e ingratitudes, para daros satisfacción de todas nuestras ofensas, sobre todo de las que más han herido el amor que nos habéis mostrado instituyendo la Santa Misa y permaneciendo dia y noche en el Santísimo Sacramento: para reparar en fin todos los males o escándalos por los cuales yo o el prójimo hayamos podido causar detrimento a la creencia de vuestra Presencia real, impedir la reverencia debida a vuestra Majestad Eucarística, y disminuir la confianza en vuestra amar misericordioso "


     Jaculatorias:
·         “Quien pudiera inmolarse en las llamas de vuestro divino amor por la salvación de los pecadores Acepad oh padre Eterno, mi sacrifica, unido al Corazón de Jesús, crucificado por mí"”
·         “Corazón de Jesús, Víctima de amor, haced que ya sea por Vos una hostia viva, santa y agradable a Dios” (por esta jaculatoria se pueden renovar las actas de adoración en espíritu más brevemente)
·         “Cuando el que sacrifica la víctima es el amor divino, por dolorosas que sean los golpes, parecen suaves”

7º OFICIO: EL ESCLAVO  
 Unido al coro de los Arcángeles, durante todo el día


         Fin especial: Honrar el anonadamiento del Corazón de Jesús en el Santísimo Sacramento, trabajando con fervor en su servicio en calidad de esclavo fiel, “Servus Christi” (Cor. 7, 22). Poner toda nuestra gloria y nuestra dicha llevar las cadenas del tierno y generoso amor que tienen al Redentor cautivo en las Sagradas Hostias.   
      
        Promesa particular: Jesús recompensará vuestras acciones en su servicio, en la medida de vuestro amor.

         Ofrecimiento de la práctica del oficio para todo el mes (primer viernes de mes):
“Oh Jesús, nuestro Rey y Maestro Divino, por el Corazón de vuestra Esclava Inmaculada y unido a los espíritus celestiales del Coro de los fieles Arcángeles, ofrezco a vuestro Corazón «hecho obediente hasta la muere”,  todas mis oraciones, obras y sufrimientos de este mes por todas las intenciones por las que os inmoláis continuamente en los Altares. Os los ofrezco más particularmente para que os dignéis hacer comprender a los hombres el amor que os ha inducido a convertiros en su verdadero esclavo, obedeciendo hasta la muerte por ellos, y quedando incomprensible sumisión a los hombres en el Santísimo Sacramento.          
        "Venced, dulce Jesús, por el atractivo de vuestra humildad eucarística, la resistencia del mundo orgullo serviros".

        Virtud particular: Conformidad con la voluntad de Dios

         Práctica de la virtud:
·         Actos de particular sumisión a los representantes de Dios, obedeciéndoles con alegría y prontitud.
·         Ejercitarse en la fidelidad en las cosas más pequeñas.
·         Ser fiel y estar atento a las inspiraciones divinas.
·         Ofrecerse a los hermanos con algunos humildes servicios
·         Acordarse particularmente de los hombres, de los dirigentes de las naciones y de los estados, que se han rebelado contra el Divino Maestro
·         En cada hora del día renovará la servidumbre que ha ofrecido al divino Corazón de Jesús, como a su Dueño y Señor, con estas palabras: ¡Oh Señor!, siervo tuyo soy;  con estas: Enséñame a cumplir tu voluntad, pues Tú eres mi Dios.

         Visitas al Santísimo / Oraciones:
        “Oh Corazón de mi Maestro Jesús, os adoro en las Sagradas Hostias, unido al Corazón Inmaculado de María y asociado al Coro de los Arcángeles, para suplir mi insuficiencia; y renueva con todo mi corazón mi esclavitud de amor hacia Vos y mi voluntad de serviros fielmente hasta la muerte. ¡Serviros es reinar!”

          "Oh Corazón Divino de Jesús, que habiendo tomado la condición de esclavo, hecho como el último habéis venido a este mundo para servir y no hacer más que la voluntad de Vuestro Padre, unido al Corazón inmaculado de la Santísima Virgen María y asociado a los espíritus celestiales del coro de los Arcángeles, os adoro aquí presente y os suplico que me concedáis la gracia de que yo también sepa emplearme sin reserva, en vuestro servicio. Admirado profundamente de veros sometido en este Sacramento, al arbitrio de los hombres, de una manera tan sorprendente, os ruego que todos mis actos de sumisión de este dia, para que vuestra servidumbre eucarística llegue a producir en el mundo efectos saludables”

         "Padre Celestial, haced que vuestro Hijo Encarnado sea en este Sacramento mejor honrado, más frecuentemente recibido y ofrecido en sacrificio con mayor fe y amor. Permitidme todavía que os pida la gracia de cumplir fielmente la virtud del Oficio y de guardar la adoración en espíritu"
        “Amor omnipotente, que has roto las cadenas que me tenían cautivo lejos de Ti. ¡Oh, si yo pudiera hacer que me siguiesen todos cuantos andan fugitivos y descarriados, como anduve yo, y que gustasen a tus pies, como gusto yo  ahora, las delicias de esta nueva y regalada servidumbre, que constituye otros tantos felices cuantos esclavos tiene! ¡Oh misteriosa sujeción de Jesús en el Sacramento de su amor! ¡Oh imán de las almas! ¡Oh dulcísimo Jesús! yo me consagro eternamente a honrarte y glorificarte y a procurar con mis esfuerzos y deseos traer a Ti todos los corazones”
      “Llama, Señor, a todos los pecadores, líbralos del duro yugo y cautiverio del pecado, admítelos a tu servicio, para que te amen, alaben y bendigan con los justos ahora y por toda la eternidad”

  Ofrenda total: “Tomad, Señor, y recibía  toda mi libertad, mi memoria, mi entendimiento y toda mi voluntad: todo mi haber y mi poseer; Vos me lo disteis, a Vos Señor lo torno; todo es vuestro, disponed de todo según vuestra voluntad.       
Dadme vuestro amor y gracia, que ésta me basta"

     Jaculatorias:
·         “Oh Señor yo soy vuestro esclavo"
·         Decir con la Virgen Santísima. "He aquí la (el) esclava(o) del Señor hágase en mi según tu palabra
·         “Corazón de mi amable Salvador, haz que arda, y siempre crezca en mi tu amor



8º OFICIO: EL SUPLICANTE
Unido al coro de los Ángeles, durante todo el día

Fin especial: Ofreciendo al Eterno Padre los méritos infinitos de Jesucristo, pedirá con fe viva gracias abundantes para todos los asociados al Sagrado Corazón de Jesús, y para todos los que se hallen en alguna necesidad, rogando en especial por los que estén en la agonía, por las almas del purgatorio, por la conversión de los pecadores, por el Pontífice y la Iglesia Católica, y por la paz y concordia entre los príncipes cristianos.

Promesa particular: “Todo lo que pidáis al Padre en mi nombre, os lo concederá Pedid y recibiréis”

Ofrecimiento de la práctica del oficio para todo el mes (primer viernes de mes):
Adorable Jesús, por el corazón inmaculado de María y asociado al Coro de los Ángeles, y en particular a las oraciones, la Guarda, os ofrezca las oraciones, las obras y los sufrimientos de este mes, en reparación de todas nuestras ofensas y por todas las intenciones por las que os inmoláis sobre el altar; los ofrezco en particular al Padre Eterno, suplicándole se digne derramar las inmensas gracias de vuestro Divino Corazón sobre todos nosotros, sobre todos los que se encuentran en algún grave peligro espiritual o temporal y especialmente sobre los moribundos, y las almas del purgatorio”

Virtud particular: perseverancia en la oración, (Caridad Fraterna)
Práctica de la virtud:

·         Cinco veces, en honor de las cinco llagas, decir con gran humildad: “Oh divino Corazón, por la llaga concedednos a todos el espíritu de fervor y la perseverancia final ”
·         Rogar por todas las personas que mueren y comparecen cada día ante Dios (Aprox. 160000) "Oh Dios mío, yo te ofrezco todas las Misas que se celebran hoy en el mundo entero por los pecadores que están en agonía) por la conversión de los pecadores, por los van a morir hoy, Que la Sangre preciosa de Jesucristo Redentor. les obtenga misericordia"
·         Permanece constante y confiado en nuestro oficio de suplicante aún en medio de las sequedades
·         Ofrecer por medio de la Santísima Virgen, las llagas de Nuestro Señor, por la conversión de los pecadores, por los que hacen ejercicios espirituales, por los devotos del Sagrado Corazón etc.
·         Pedir a Dios, especialmente en las comuniones y en la oración, que oiga benignamente nuestros ruegos, por ese Corazón adorable, digno objeto de sus complacencias.
·         Practicar la humildad, humillándose alguna vez, por ejemplo, hablando a su enemigo, o saludando al que le tiene rencor, o dando la preferencia a otro; dirá cinco veces cada dia: «Si no me hago como niño, no entraré en el reino de los cielos.»

Visitas al Santísimo / Oraciones:

“Jesús, Rey de Corazón Divino uniéndome al Corazón Inmaculada de María y asociado al coro de los Ángeles especialmente al de los Ángeles de la guarda para suplir mi insuficiencia os adoro durante todo el dia y os ofrezco las oraciones, los trabajos, los sufrimientos de hoy, uniéndolos a los méritos infinitos de vuestro Sagrado Corazón en reparación de todas nuestras ofensas y por todas las intenciones por las que os inmoláis sobre el Altar, Suplico a vuestra misericordia que quiera derramar abundantes gracias sobre la Santa Iglesia, sobre nuestra congragación. Sobre nuestros miembros. Os pido particularmente por todos los que se encuentran en al algún grave peligro espiritual o temporal, por los agonizantes, por los que han de morir sin agonía y por las almas del purgatorio”
“Divino Corazón de Jesús os adoro con todo el afecto de mi alma por el Corazón Inmaculada de María. Por su intercesión y unido al coro de los Ángeles especialmente de los Ángeles de la Guarda suplico a vuestro Sagrado Corazón que derrame abundantes gracias sobre nosotros para nuestra santificación, sobre los que se encuentran un grave peligro espiritual o corporal y sobre los que están a punto de morir. Os suplico en fin. que os dignéis librar a las almas del Purgatorio. Como prenda de su rescate os  ofrezco vuestras santas Llagas por el Corazón Inmaculado de María. Oh Corazón dulcísimo, dignaos concedernos igualmente la gracia de guardar fielmente la adoración en espíritu y de cumplir la virtud del oficio”
 “Padre Santo, os ofrezco todas y cada una de las Misas celebradas o que se van a celebrar hay en toda la Iglesia, afín de que por la Sangre de Jesús, vuestro sz0, y la intercesión de la Bienaventurada Virgen María, transida de dolor al pie de la Cruz, os dignéis conceder a los justos el gran don de la perseverancia, a los pecadores la gracia de una perfecta conversión, y a todos los fieles de Cristo, sobre todo a mí y a mis hermanos en el momento de la muerte la recepción del Santo Viatico, la santa unción y una muerte preciosa a vuestros ojos. Por el mismo Jesucristo Nuestro Señor”

“Escucha ¡Oh Corazón clementísimo! Las voces de los menesteroso y se el consuelo de los atribulados, pues tu mayor placer siempre fue perdonar y hacer  bien a los hombres”

     Jaculatorias
·         “Corazón Sagrado de Jesús, ten piedad de nosotros”
·         “María Madre mía, líbranos de todo pecado y toda mala compañía”
·         “Corazón de mi amable Salvador, haz que arda siempre crezca en mi tu amor”


9º OFICIO: EL CELADOR  

Unido al coro de los Principados (los nueve coros de Ángeles), durante todo el día


       Fin especial: Procurar por todos los medios posibles la gloria del Sagrado Corazón de Jesús, velando atentan por la salvación y perfección del prójimo, especialmente de los propios hermanos. Pensar especialmente en la misiones, sobre todo en las de Asia, Africa y Oceanía

       Promesa particular: “Nuestro Señor reserva a los que hacen este Oficio incalculables tesoros de gracia y nos asegura que su nombre será grabado para siempre en su corazón (Santa Margarita María)

   Ofrecimiento de la práctica del oficio para todo el mes (primer viernes de mes):         
"Adorable Jesús, por el Corazón Inmaculada de María y asociado a os nueve coros Angélicos y especialmente al Corazón  los Principados, os ofrezco todas mis oraciones, obras y sufrimientos de este mes por todas las intenciones por las que os inmoláis sobre los Altares. Os los ofrezco en particular para que el Corazón de Jesús sea conocido y adorado en toda la tierra, y alabado y glorificado por mis hermanos y compañeros. "
Virtud particular: Aprovechar con celo y con una discreta prudencia todas las ocasiones para  impedir cualquier ultraje al Sagrado Corazón, extender el amor de este Corazón adorable y aumentar el número de adoradores ejemplo y con la palabra.

        Práctica de la virtud:
·         ingeniarse para impedir las ofensas a Dios entre los que nos rodean
·         evitará cuanto le, sea posible los pecados de murmuración, hablando bien de todos, y manifestando su disgusto, aunque sea tan solo mostrándose triste con los que murmuraren
·         Procurar enfervorizar las almas cristianas, especialmente las de nuestros hermanos, comunicándoles la llama del verdadero Celo.
·         Dirigir peticiones al Sagrado Corazón para que impida las ofensas hacia Él y hacia su amor
·         Rogar para que aumente, por nuestros ejemplos y palabras, el número de los verdaderos adoradores
·         En cada hora del dia adorará, desde donde se halle, al divino Corazón, pidiéndole humildemente que disimule faltas que los compañeros hayan cometido en aquella hora, en el cumplimiento de sus obligaciones.

        Visitas al Santísimo / Oraciones:        

       
“Divino Corazón de Jesús. os adoro en el Santísimo Sacramento durante Todo el dia. Por el Corazón Inmaculado de María y en unión de los nueve coros de Ángeles, y especialmente el de los principados, para suplir mi insuficiencia, y ofrecer un culto de amor ardiente e inflamado”
        “Divino Corazón de Jesús, os adoro con toda mi alma por el Corazón Inmaculada de María. Por su intercesión y unido a los nueves Coros de los Ángeles, especialmente al coro de los Principados, os pido con instancias que vuestro Corazón sea conocido en toda la tierra, que los idólatras y los infieles que no os conocen, y que todos los cristianos que no viven en conformidad con su Fe, sean atraídos por vuestro Amor. Dignaos concedernos la gracia de guardar fielmente la adoración en espíritu y de cumplir la virtud del oficio”
         “Oh ardiente Corazón de Jesús, tan amable como amante del hombre ¿Cuándo te veré amado por todos ardentísimamente? Séame dado, Señor, por gracia tuya, publicar en todo el mundo las maravillas de tu amor, o logre por lo menos, atraerte un alma que te ame de todo corazón. Pero esto es poco: concédeme que gane para Ti los corazones de cuantos hombres viven sobre la tierra”
        Pedir a Jesucristo la conversión de tantos infelices, pedírsela al corazón purísimo de María, refugio pecadores. Rezar nueve veces el "Gloria Patri.”

          Jaculatorias:
·            Donde no hay celo, no hay Amor” (San Agustín)
·    “Oh Corazón el más amable y amante de los hombres ¿Cuándo seréis amado de todos              ardientísimamente?
·         “María Madre mía, líbranos de todo pecado y de toda mala compañía”
“Corazón de mi amable Salvador, haz que arda y siempre crezca en mi tu amor”
FIN

No hay comentarios:

Publicar un comentario